Aliviar la Inflamación en la Edad: El Impacto del Aceite de Algas y la Proteína de Suero


Mantente Activo y Saludable a Medida que Envejeces

El envejecimiento está asociado con un aumento de las inflamaciones crónicas, que a su vez están relacionadas con diversas enfermedades como el cáncer. Un equipo de investigadores alemanes ha descubierto que el aceite de algas, la proteína de suero y el ejercicio regular pueden reducir estas inflamaciones en personas mayores.

La Ciencia Detrás de la Inflamación y el Envejecimiento

Investigadores del Instituto Alemán de Investigación Nutricional Potsdam-Rehbrücke (DifE) han demostrado que una dieta rica en ácidos grasos omega-3 y proteínas, combinada con ejercicio regular, puede tener efectos positivos en la inflamación en personas mayores. Los resultados de su estudio se han publicado en el "International Journal of Molecular Sciences".

Estudio: Intervención Nutricional y Ejercicio

En una prueba piloto de ocho semanas, 61 participantes saludables de entre 65 y 85 años fueron sometidos a un programa de entrenamiento que incluía ejercicios de vibración guiados y ejercicios de fuerza autónomos. Los participantes fueron divididos aleatoriamente en tres grupos: uno recibió bebidas de proteína de suero y aceite de algas rico en omega-3, otro recibió solo proteína de suero, y el tercero no recibió suplementos.

Resultados Prometedores

La profesora Kristina Norman, líder del estudio, destacó que los hombres que siguieron una dieta rica en omega-3 y proteínas, junto con ejercicio físico, mostraron una reducción significativa en los marcadores de inflamación. Aunque una dieta rica en proteínas sin omega-3 también redujo los marcadores inflamatorios, no fue tan efectiva como la combinación de ambos suplementos.

Conclusión

El estudio concluye que las inflamaciones relacionadas con el envejecimiento, que están vinculadas con el desarrollo de diversas enfermedades, pueden ser influenciadas positivamente mediante una dieta adecuada y ejercicio. Mantener un estilo de vida activo y una dieta saludable sigue siendo beneficioso incluso en la vejez.

Este hallazgo resalta la importancia de cuidar nuestra alimentación y actividad física para mantenernos saludables y reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con la inflamación crónica a medida que envejecemos.
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